El balonmano conquista Erandio

DÍA DEL BALONMANO BENJAMÍN DE VIZCAYA

                                     

Maristas. El club colegial bilbaíno contó con la presencia de Xabier B., Xabier G., Daniel, Valentina, Juliana, Egoitz, Ander, Borja, David e Imanol y los entrenadores Nacho y Carlos./ U.P

La séptima edición del Día del Benjamín congrega a más de trescientos deportistas

Felipe García BILBAO

El polideportivo de Altzaga, en Erandio, acogió durante el pasado sábado la celebración de la séptima edición del Día del Balonmano. Destinado a deportistas de edad benjamín, la cita trata de convertirse en una fiesta en la que se reúnen la totalidad de equipos y jugadores vizcaínos. Sin ánimo competitivo, la principal inquietud de los organizadores es que todos los chavales disfruten del deporte con las mismas oportunidades.

El polideportivo de Altzaga, en Erandio, acogió durante el pasado sábado la celebración de la séptima edición del Día del Balonmano. Destinado a deportistas de edad benjamín, la cita trata de convertirse en una fiesta en la que se reúnen la totalidad de equipos y jugadores vizcaínos. Sin ánimo competitivo, la principal inquietud de los organizadores es que todos los chavales disfruten del deporte con las mismas oportunidades.

«Los benjamines son la base del deporte. Son el futuro. Esta actividad se viene desarrollando desde hace siete años bajo el impulso de la Diputación Foral de Vizcaya y la Federación Vizcaína de Balonmano. Es una forma de que los chavales se enganchen al balonmano. Todos disponen del mismo número de minutos para jugar», desvela José Manuel Esteban, vicepresidente de la sección de balonmano de la Sociedad Polideportiva Erandio y organizador del evento.

Más de treinta conjuntos de categoría benjamín tomaron parte en el Día del Balonmano. En total, unos 350 niños disfrutaron de una jornada en la que los diferentes encuentros programados se extendieron en doble sesión. Por la mañana, desde las nueve hasta las dos, y por la tarde, desde las cuatro hasta las ocho. La cita albergó un total de cuarenta partidos que se desarrollaron bajo la modalidad de minibalonmano, disciplina destinada a equipos de categoría escolar en la que se adaptan las dimensiones del terreno de juego y de las porterías a la edad de los deportistas.

Regalos

El carácter festivo de la cita quedó de manifiesto con el sorteo de diversos regalos entre la totalidad de jugadores participantes. «Otros años hemos sorteado bicicletas, pero esta vez la crisis lo ha impedido. Entre los regalos había una cámara digital fotográfica y diverso material deportivo. No elegimos a los mejores jugadores. Hacemos sorteos y así todos tienen las mismas oportunidades de hacerse con el premio», afirma José Manuel Esteban